Corea del Norte prepara sus misiles para eventual ataque a EEUU
El dirigente norcoreano Kim Jong-un ordenó este viernes empezar los preparativos con miras a atacar con misiles estratégicos el continente americano y las bases estadounidenses en el Pacífico y Corea del Sur.
La orden, emitida durante una reunión de emergencia nocturna con los altos mandos del ejército, es una respuesta directa al empleo por Estados Unidos de bombarderos furtivos B-2, capaces de transportar armas nucleares, en sus actuales maniobras militares conjuntas con Corea del Sur, declaró Kim.
En caso de una provocación "temeraria" de los estadounidenses, las fuerzas norcoreanas "golpearán sin piedad el continente americano..., las bases militares del Pacífico, incluyendo Hawai y Guam, y las de Corea del Sur ", dijo el dirigente, según KCNA, la agencia oficial de noticias norcoreana.
En momentos en que aumenta la tensión en la península coreana, dos bombarderos furtivos B-2 volaron en entrenamiento el jueves sobre Corea del Sur, para subrayar el compromiso de Estados Unidos en su alianza militar con Seúl, en caso de agresión por parte de Corea del Norte .
Kim Jong-un señaló que el vuelo de los bombarderos furtivos era más que una demostración de fuerza y equivale a un "ultimátum (de los estadounidenses) y muestra que ellos quieren a cualquier precio lanzar una guerra nuclear".
El jefe de estado mayor del Ejército Popular de Corea, el director de operaciones y el comandante de operaciones estratégicas y cohetes estuvieron presentes en la reunión de emergencia, realizada este viernes a las 0H30 locales (15H30 GMT del jueves ).
Washington rara vez anuncia los vuelos de entrenamiento del B-2, un arma temible, diseñada para misiones especiales de bombardeo estratégico, a elevadas altitudes (hasta 15.000 m), detrás de las líneas enemigas.
Considerado indetectable y capaz de volar cerca de la velocidad del sonido, el B-2 puede transportar hasta 18 toneladas de armas convencionales o nucleares, incluidas 16 bombas de 900 kg guiadas por satélite y ocho terribles bombas GBU-37antibunker.
Pyongyang ya había amenazado el martes a Estados Unidos con atacar sus bases del Pacífico o su territorio, pero en este caso, el anuncio, siempre transmitido por KCNA, procedía del comando del ejército. Esta vez se trata del dirigente del país.
El jueves, Washington se declaró una vez más "preparado para enfrentar cualquier eventualidad" procedente de Corea del Norte, según declaraciones del secretario de Defensa estadounidense, Chuck Hagel.
Los expertos militares estadounidenses anotan, sin embargo, que, por el momento, el aumento de tono en la retórica belicosa de Corea del Norte no va acompañada de acciones militares.
Pyongyang, por ejemplo, se ha cuidado de cerrar el sitio industrial de Kaesong, a pocos kilómetros al norte de la frontera entre las dos Coreas y operado por ambos países, un enclave que le genera divisas.
Desde principios de marzo y la adopción de nuevas sanciones de la ONU contra Pyongyang, después de una tercera prueba nuclear, Corea del Norte ha aumentado sus declaraciones con tono cada vez más guerrero, amenazando a Seúl y Washington con "ataques estratégicos" y una "guerra total".
"Pero no hay que interpretar esto como señal de una inminente guerra", dijo Kim Yong-hyun, un experto en Corea del Norte de la Universidad Dongguk. "Es una reacción esperada y calibrada ante el despliegue de B-2, y este juego con Estados Unidos va a seguir por un momento", agregó. |