La posibilidad de una guerra contra Irán es la principal preocupación no solo del mercado petrolero, sino de la economía global. ¿Traerá esta el infortunio para el mundo?
 ¿Cuándo comenzará la guerra contra Irán?
 Los más optimistas creen que Irán hará todo lo posible para no 
involucrarse en un conflicto militar. Pero la situación se complica por 
las elecciones parlamentarias en la República Islámica programadas para 
el próximo 2 de marzo, cuyos contendientes podrían usar la posible 
confrontación militar como un factor para alcanzar el poder.
 En este contexto surge la duda: ¿iniciará EE. UU. una guerra antes del 2
 de marzo a sabiendas de que con ella la oposición podría perder la 
oportunidad de llegar al poder u obligarlo a hacer concesiones en 
política exterior?
 Según los expertos, Israel es otro factor clave en la tensa situación. 
Para el país judío los resultados de las elecciones no son 
significativos, lo que no descarta que opten por entablar una 'guerra 
relámpago' en marzo.
 No obstante, no sólo hay que considerar aspectos políticos y militares 
para determinar la fecha del comienzo de las hostilidades. Un factor 
importante es la reacción de los consumidores ante la ausencia de unos 2
 millones de barriles diarios en el mercado.
 Malos presagios para el mundo
 El bombardeo de las instalaciones nucleares iraníes; la operación 
militar a gran escala; la destrucción de su Marina y bases militares, y 
el bloqueo del Estrecho de Ormuz con el cese total de las exportaciones 
petroleras provocarán el 'terror económico' en el mundo. No solo 
afectará a Irán y a sus importadores de petróleo, como los países del 
Golfo Pérsico, sino también se agravará la recesión en la UE y 
contribuirá a la desaceleración del PIB mundial.
 Según la mayoría de los expertos citados por el portal Vestifinans, el
 primer efecto de la guerra será el aumento de los precios del petróleo 
de 150 a 200 dólares por barril, lo que a su vez empeorará la crisis en 
los países desarrollados.
 Considerando que nadie sabe cuánto tiempo durará la guerra, el rango 
del aumento de los precios del crudo podría alcanzar máximos 
inesperados.
 El estrecho de Ormuz, la piedra en el zapato
 Los analistas creen que aunque la guerra contra Irán empiece en marzo, aún queda un obstáculo para llegar al país: tomar el Estrecho de Ormuz.
 Algunos estiman que Irán puede fácilmente bloquear el transporte en la 
zona, que tiene unos 33 km en su punto más estrecho, y colocar ahí un 
gran número de cohetes y minas. Para Irán sería el modo más sencillo, 
eficiente y no tan caro de resguardarse.
 Pero aunque existen alternativas para que el petróleo iraní burle el embargo
 con ayuda de China e India, nadie puede obligarlo a cooperar. Así que 
es probable que las operaciones militares sean inevitables y un factor 
importante para vencer son los nuevos modos de transporte petrolero.
 Los verdaderos ganadores
 Con el comienzo de cada conflicto militar en Medio Oriente los mercados
 financieros han presentado tendencias similares: aumento de los precios
 del petróleo y de la cotización del dólar estadounidense; caída del 
mercado de valores; y aumento de las cotizaciones de oro. Además, los 
expertos aconsejan que se preste atención al euro, cuya caída se 
acelerará.