http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2012/05/120507_tecnologia_terremoto_artificial_aa.shtml
ngenieros en California, Estados Unidos, ejecutaron
una serie de terremotos artificiales para poner a prueba la resistencia
de un edificio repleto de equipamiento médico.
Este hospital ficticio se construyó sobre una
"plataforma vibratoria" capaz de someter al edificio a movimientos
similares a los de un terremoto real.
Las pruebas se hicieron para
determinar si los hospitales construidos sobre apoyos de goma serían
efectivos a la hora de minimizar el impacto de un terremoto.
El uso de estos soportes es común en países de alta incidencia sísmica como Japón.
El proyecto, con un costo de US$5 millones
también trata de comprobar si estos sistemas de goma podrían evitar
daños en edificios como centros de almacenamiento de datos, para que
estos puedan seguir funcionando después de un gran terremoto.
"Lo que hace este sistema de apoyos es
desacoplar el edificio del movimiento en el suelo durante un terremoto,
como poner al edificio sobre patines", explica Tara Hutchinson,
profesora de ingeniería de la Universidad de California, en San Diego.
Según dijo, mientras muchas investigaciones se
centran en la integridad estructural de los edificios tras un sismo, muy
pocos examinan el impacto sobre contenidos vitales como escaleras,
ascensores y otras partes del edificio que les permiten llevar a cabo
sus funciones.
Equipamiento delicado
El edificio se equipó con unidades de cirugía y
cuidados intensivos, servidores de computadoras y otros equipos
eléctricos, así como escaleras y ascensores operativos.
La estructura, de 24 metros fue revestida de
estuco de hormigón prefabricado y sintético, dos materiales que se
emplean comúnmente en proyectos de construcción comercial, así como una
gran torre de agua y un sistema de calefacción y aire acondicionado
instalado en el techo.
En el primer día de pruebas a principios de
abril, la plataforma vibratoria sometió al edificio a un movimiento
similar al registrado durante el terremoto Northridge de 1994 en Los
Ángeles, de 6,7 grados en la escala Richter. También se probó a una
magnitud de 8,8 grados, como la del terremoto de Chile de 2010.
Los ingenieros comprobaron que los apoyos de
goma o (aislantes de base) protegieron con éxito el edificio de muchos
de los daños resultantes del movimiento lateral de un terremoto.
Para salvar vidas
Los ingenieros sometieron al edificio a un terremto de la misma intensidad que el que afectó Chile en 2010.
Edificios, escaleras, equipo médico y el resto de maquinaria quedaron intactos, aunque sí se dio algún que otro daño menor.
"Lo que descubrimos es que los contenidos del
edificio siguieron funcionando tras los 'terremotos', afirmó la
profesora Hutchinson. "Si el edificio hubiera tenido a personas vivas
usando equipo de cuidados intensivos, los apoyos les habrían salvado la
vida".
Ahora, los ingenieros se disponen a quitar los
aislantes de goma de la base del edificio y repetir, durante las
próximas tres semanas, los terremotos simulados para así poder realizar
una comparación directa entre los daños resultantes de un terremoto en
un edificio con y sin los apoyos de goma.
Este tipo de aislantes ubicados en la base del edificio ya han sido colocados en los ayuntamientos de Oakland y San Francisco. |