http://www.el-nacional.com/noticia/30892/24/Se-hunde-el-mito-de-mujeres-y-ninos-primero.html
Estudio de investigadores suecos revela que en la
mayoría de los casos de desastres como el del Titanic prevalece el
sentimiento de supervivencia sobre el de actuar de acuerdo a las normas La
creencia de que las mujeres y niños son los primeros que deben ser
salvados es en gran parte un mito. Así lo indica un estudio realizado
por investigadores de la Universidad de Uppsala, en Suecia.
Del
análisis de los sobrevivientes de 18 desastres marítimos surge que las
mujeres "tienen una desventaja clara en cuanto a supervivencia”, dicen
los autores del estudio.
El informe asegura que los capitanes y la tripulación tienen una tasa de supervivencia significativamente mayor.
El
desastre del Titanic, ocurrido hace 100 años, fue una rara excepción
porque el capitán amenazó con disparar a aquellos que desobedecieran,
según el estudio realizado por los economistas Mikael Elinder y Oscar
Erixson
"Una cosa para recordar del Titanic es que las mujeres
sobrevivieron en mucha mayor medida que los hombres”, explicó Elinder a
la BBC.
La regla de "mujeres y niños primero” se ve ahora como la
forma de comportamiento en emergencias. Y para los autores, el capitán
tiene el poder de obligar a que se cumplan las normas y que todos actúen
en consecuencia.
Hundirse con el barco
Hasta
la idea de que los capitanes se hunden con el barco es cuestionada por
el estudio. "Casi la mitad de los capitanes sobrevivió en los desastres,
eso a pesar de cientos de pasajeros muertos en cada uno de ellos”,
apuntó Elinder. La explicación que encuentra es simple: "querían salvar
su vida”, y pone como ejemplo lo sucedido recientemente en el costa
Concordia.
Los autores aseguran que sus hallazgos muestran que el
comportamiento en situaciones reales de vida o muerte es mejor descrito
por la expresión "sálvese quien pueda”.
El estudio abarcó
desastres marítimos a lo largo de tres siglos, que incluyen a unas
15.000 personas. Los autores dicen que los datos de 16 de los barcos
estudiados nunca fueron analizados de esta forma anteriormente.
El
primero fue el barco militar HMS Birkenhead el 26 de febrero de 1852,
que según los expertos a menudo es visto como el suceso donde apareció
la idea de salvar a mujeres y niños primero.
El Birkenhead
transportaba alrededor de 20 familiares de soldados, además de tropas.
Había demasiado pocos botes salvavidas para todos a bordo, y cuando
empezó a hundirse se dieron órdenes para mujeres y niños fueran salvados
primero. Los 191 sobrevivientes incluyeron a todas las mujeres. La
cifra de muertos fue de 365.
Situación límite
Cuando
el transatlántico SS Arctic se hundió en septiembre de 1854, a las
mujeres y niños también se les ordenó ir a los botes primero. Pero la
evacuación fue desorganizada, y rápidamente se llenaron con la
tripulación. El capitán amenazó con responder con violencia a la
desobediencia, pero dudó al hacer cumplir las órdenes. La cifra total de
muertos fue de 227, incluyendo a todas las mujeres y niños, y los 41
sobrevivientes eran mayormente miembros de la tripulación.
Cuando
el MS Estonia empezó a hundirse en el Báltico en 1994, se escoró
rápidamente, causando pánico a bordo. Eso complicó la puesta a punto de
los botes salvavidas, y la mayoría de los 852 que murieron quedaron
atrapados en el barco. No se registró una orden de "mujeres y niños
primero”. Y la evacuación no se hizo en forma ordenada, dijo el informe.
Hubo 137 sobrevivientes.
El análisis mostró que la diferencia
por género en las tasas de supervivencia en los desastres se ha achicado
desde la Primera Guerra Mundial. Los autores dicen que esto está
relacionado con el estatus más alto que tienen las mujeres en la
sociedad moderna.
También señalan que en desastres más recientes
la gente muestra generalmente altruismo hacia los más vulnerables, como
aquellos con discapacidades.
Todos saben cómo se debe actuar en
una situación límite como las que se abordan en el estudio. Pero nadie
puede asegurar que en una situación real actuará de tal o cual forma. El
propio Elinder lo confiesa: ''Me gustaría pensar que salvaría al menos a
mi familia, pero es muy difícil saber exactamente cómo se comportaría
uno en estas situaciones”. |