Durante la primera semana de enero de 2013 se retiraron 114.000
millones de dólares de los mayores bancos estadounidenses
La Reserva Federal de EE.UU. alerta de una importante retirada de depósitos de
las cuentas bancarias de la nación: el sistema financiero no había visto una
salida de fondos tan masiva desde los atentados del 11-S.
Tan solo
durante la primera semana de enero de 2013 se retiraron 114.000 millones de
dólares de 25 de los mayores bancos de
EE.UU., empujando los depósitos a 5,37 billones de dólares, informó la Reserva
Federal de EE.UU.
Los analistas financieros sugieren que podría deberse al fin del denominado
'Programa de Garantía de Cuenta Transaccional ', vigente hasta el pasado
31 de diciembre, lo que podría haber llevado a los clientes a retirar el dinero
que el Gobierno dejó de asegurarles.
Dicho programa fue creado a raíz de la crisis de 2008 con el fin de fortalecer
la confianza en el sistema bancario, así como proporcionar estabilidad y
liquidez a los clientes con grandes depósitos. Garantizó cuentas sin intereses
con un límite de 250.000 dólares y estaba dirigido a los bancos medianos y
pequeños, dado que los creadores del programa creían que los grandes bancos serían
capaces de afrontar la crisis por sí mismos.
La rápida retirada de dinero sorprende a los analistas financieros ya que los
fondos también están saliendo de las entidades financieras que
supuestamente estaban a salvo. Los expertos preveían que los clientes de bancos
pequeños y medianos apostarían por otros mayores a partir del 31 de diciembre.
Sin embargo, no ha sido así.
Entre las razones detrás de este flujo imprevisto de fondos, los analistas apuntan que podría
deberse al inicio del año, cuando muchos sacan dinero de sus cuentas bancarias.
Otros sostienen que los fondos podrían haberse retirado para su posterior
inversión.
Un grupúsculo de inversores sacan dinero por el fín del programa de garantía, mas la cuesta de enero, mas los que lo hacen por que lo hace el de al lado "que sabe mucho de esto", y al final se crea una corriente de desconfianza económica. El problema es que estas cosas a los ciudadanos de a pié nos sale caro, pues si el banco tiene poca liquidez encarece los prestamos, empeora las condiciones, etc. Y por supuesto la economía afecta a nivel global: si un banquero se tira un pedo en California, otro banquero en Andorra levanta una ceja y se pregunta ¿quién ha sido?.