visto en el blog de skiper http://www.europapress.es/sociedad/ciencia/noticia-tormentas-solares-podrian-derribar-satelites-20110929121850.html
MADRID, 29 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las tormentas
solares no sólo es una amenaza para la magnetosfera de la Tierra, sino
que también podrían provocar la caída de los satélites más cercanos al
planeta, según han explicado expertos de la NASA, quienes han
descubierto que las llamaradas afectan al cinturón Van Allen interior.
Investigadores de la NASA han llevado a cabo un estudio en el que
han descubierto que la radiación solar puede afectar a los cinturones
Van Allen de partículas de alta energía que rodea la Tierra de una
manera más agresiva de lo que se creía.
Los cinturones se dividen en dos zonas distintas. El cinturón
exterior, que se compone de electrones, se extiende desde
aproximadamente de 25.500 a 51.000 kilómetros por encima de la
superficie; mientras que el cinturón interior, que consiste en una
mezcla de electrones y protones, se extiende desde 6.400 a 12.800
kilómetros por encima.
Según explica la NASA, los científicos tenían conocimiento de que
el cinturón exterior podría llegar a activarse de manera más intensa
durante las tormentas geomagnéticas del sol, sin embargo, todavía no se
había pensado que este tipo de acontecimientos también podría afectar
al cinturón interior.
Ahora simulaciones por ordenador sugieren que durante una
tormenta de alto nivel los electrones en el cinturón interior, también
podrían convertirse en energía y, la radiación podría seguir siendo muy
intensa durante varios años después de la tormenta. "El aumento de la
radiación en la zona interna puede durar hasta una década y dañaría
satélites durante años después de una tormenta muy fuerte", ha
explicado el autor principal del estudio, el físico Shprits Yuri.
Así, Yuri ha apuntado que la radiación podría dañar los satélites
en esa zona y, potencialmente, reducir sus vidas en cinco sextas partes
o más. "No se destruirían todos los satélites a la vez, pero, según los
cálculos realizados, una tormenta muy fuerte puede aumentar hasta diez
veces la dosis de radiación en el cinturón interior lo que supondría
que, dentro de unos años, podrían desaparecer una porción significativa
de satélites que recorren esta zona interna".
Tras este hallazgo, los científicos estudian formas de evitar que
los satélites acaben dañados por las llamaradas solares. Según ha
indicado Yumi, primero hay que calcular los riesgos y el coste estimado
de lo que se pude hacer, ya que, si el coste es muy elevado "es posible
que compense aceptar los riesgos y empezar a prepararse para reponer la
flota".
Parte de las incógnitas que aún quedan por contestar sobre este
trabajo podrán despejarse en 2012, año en el que la NASA tiene previsto
enviar dos misiones para estudiar los cinturones de radiación en el
plano ecuatorial y en baja altitudes. |